¡Hola amigues! ¿Cómo les trata el final del año? Yo estoy tratando de tomarla con mucha calma y seguramente desconectaré de redes los próximos días, pero antes de hacerlo quería compartir el último blog del año.
Cuando a veces coloco cajitas de preguntas en Instagram obtengo varias preguntas que se repiten una y otra vez y son: ‘¿cómo encontraste tu estilo?,¿como encuentro el mío?, ¿Cómo le hago?, etcétera, etcétera.
Cuando nos encontramos persiguiendo un camino artístico hay un deseo constante de tener un estilo personal y a veces es frustrante no encontrarlo. A veces pareciera que estamos en una carrera constante para ver quién tiene el mejor ‘estilo’, o quién lo encuentra primero y solemos olvidar que cada uno de nosotros recorre un camino muy personal que tiene sus propios tiempos y sus propias maneras de desarrollarse.
En este afán solemos olvidar quiénes éramos o en quién nos queríamos convertir cuando comenzamos este camino, y aquí viene una pregunta, cuando tu identidad comienza a salir a la luz ¿la dejas ser?¿o le pones condiciones porque quieres que tu identidad sea más como x o y persona y menos como tú?
Ser uno mismo es en realidad una tensión constante entre lo que en verdad se es y lo que los demás quieren que seas. Y es normal que algunas nuestras cualidades se vean reflejadas en lo que hacemos y es natural que no estemos conformes con tooooodo lo que somos, pero solemos caer en el vicio de compararnos con otras personas y criticarnos a nosotros mismos más de la cuenta.
Y hoy en día que eso se puede medir gracias a los likes y seguidores, peor.
El potencial de cada uno de nosotros es distinto y creo que es necesario hacer el ejercicio de focalizar aquello que desde nuestra singularidad podemos ofrecer, aunque a ti te parezca que es poco. Y no con la finalidad de destacar y ser distinto, sino para compartir la experiencia de ser nosotros mismos con otros y al mismo tiempo, disfrutar de la experiencia de ser de los demás.
La naturaleza es una de mis grandes maestras, y como maestra me ha enseñado que la belleza es diversa, y entre más diversa sea, más rica es.
Estaría bueno que te preguntaras: ¿Qué es lo más lindo que tienes? Aquello que desde tu singularidad puedes ofrecer es un regalo para todos, aunque la sociedad nos haya condicionado a compararnos y competir; o a pensar que si alguien se destaca en algo nos opaca a nosotros. Para tener éxito en algo no es necesario dejar a otros atrás, o aplastarlos; de hecho, el aprender a disfrutar del éxito de los demás nos enriquece un montón.
Entonces, ¿Cómo encuentras tu estilo personal? La verdad no creo que haya una sola respuesta, o una lista de pasos para lograrlo. Pero podría aconsejarte que empieces a dejar que se muestre lo que hay dentro tuyo sin condiciones, sin criticarlo tanto e intentando potenciar aquellas cualidades que realmente te gustan de ti.
UPDATE
Diciembre ha sido un mes de compartir con otros, a principios de mes hice un taller de cocina vegana con Maca Bites, a quién admiro demasiado y wow! Ha sido una experiencia en extremo enriquecedora; aprendimos a hacer una ensalada de coliflor deliciosa, natilla, pan de yuca, chocolate caliente y, ¡tamales!
Es en estos espacios donde uno aprende las cosas hermosas que cómo humanos podemos dar, y apreciar los alimentos que nos da la madre tierra. Creo que ese ha sido el gran aprendizaje de 2022 para mí: apreciar y agradecer mucho.
En fin, tomaré unas vacaciones desconectada del ruido digital para apreciar y agradecer lo que tengo cerca, más sin embargo quiero extender mi agradecimiento a todos y cada uno de ustedes por estar aquí un año más (y darle la bienvenida a las nuevas personitas), por llenar mi trabajo de tanto cariño y por escribirme mensajes bonitos de cuando en cuando. Realmente lo aprecio mucho. No siendo más les deseo un próspero, feliz y abundante 2023.
Nos vemos en otro blog 🙂
Alejandra
Comments